Ubicada en el exclusivo complejo de Casa de Campo, la impresionante mansión de Marc Anthony, conocida como “El Oasis”, era una joya arquitectónica que combinaba lujo, elegancia y un entorno natural de ensueño.
Esta residencia, diseñada por la firma DM Dominicana, según sus visitantes, era un testimonio del gusto exquisito del artista por la comodidad y el estilo.
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Con 10,000 pies cuadrados de espacio, “El Oasis” ofrecía una experiencia única donde se fusionaba la opulencia con la serenidad del Caribe. La casa principal destacaba por sus acabados de lujo en pino americano, que aportaban calidez natural a los amplios espacios interiores.
Además, la propiedad contaba con varios bungalows, lo que permitía alojar hasta 24 personas en un ambiente de privacidad y confort.
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El exterior de la mansión tenía con senderos rodeados de exuberante jardinería que invitaban a relajarse y disfrutar de la naturaleza. Dos piscinas entre las amenidades más destacadas, una de las cuales emulaba una playa artificial, creando un rincón de relajación perfecta bajo el sol dominicano. Junto a una de las piscinas, una palapa de dos niveles con un set de entretenimiento, que incluía una pantalla y bocinas, convirtiéndolo en un espacio ideal para reuniones familiares o eventos especiales.
En cuanto a la decoración, la casa estaba adornada con obras del renombrado artista Fernando Varela y mobiliario de la firma Roche Bobois, según destaca Architectural Digest. Detalles que aportaban un toque de sofisticación y arte para realzar la belleza natural de la villa.
“El Oasis” no solo era un refugio privado para Marc Anthony y sus seres queridos, sino también un testimonio de cómo la arquitectura y el diseño pueden crear un espacio que es tanto un hogar como una obra de arte.