La industria de bebidas no alcohólicas en la República Dominicana asegura que aporta aproximadamente 15,000 millones de pesos al año al fisco nacional, de los cuales un 33.3% corresponde al pago del Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), a través de sus compras a empresas locales. Además, este sector genera alrededor de 60,000 empleos en el segmento comercial.
La información fue proporcionada a Diario Libre por la directiva de la Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas de la República Dominicana (Asibenas). Los miembros de la asociación expresaron su apoyo a los objetivos de la reforma fiscal, pero advirtieron que un aumento en los impuestos sobre las bebidas no alcohólicas con azúcar añadida podría incrementar el gasto diario de los consumidores entre un 25% y un 50%, elevando así el precio de refrescos, jugos, maltas y botellas de agua, entre otros productos.
Nicol Valerio, directora ejecutiva de Asibenas, explicó que los empresarios del sector están dispuestos a participar en la vista pública del proyecto de ley de Modernización Fiscal para abordar los posibles efectos que un aumento en el ITBIS tendría sobre los consumidores, quienes serían los más afectados por los cambios propuestos. El gobierno ha señalado que, con esta reforma, se busca recaudar 3,299.1 millones de pesos adicionales del sector.
Valerio precisó que las 13 empresas que conforman la asociación aportan actualmente 5,411 millones de pesos en impuestos directos. «Un incremento de aproximadamente 3,000 millones de pesos representaría un aumento de más del 60% en la carga tributaria directa para nuestra industria, lo que colocaría a nuestro sector en una clara desventaja competitiva, limitando nuestras oportunidades de crecimiento y desarrollo», subrayó.
En el país, hay alrededor de 80,000 colmados que venden estos productos diariamente, y el 90% de la distribución de esta industria se realiza a través de estos establecimientos. Por lo tanto, cualquier medida económica que se aplique al sector tendrá un impacto directo tanto en las empresas como en el bolsillo de los dominicanos.
Impacto en los Consumidores Vulnerables
Las bebidas no alcohólicas son principalmente consumidas por la población de menor poder adquisitivo, especialmente aquellos que tienen un gasto diario de menos de 50 pesos en productos básicos. Según Juan Roberto Amell, los colmados enfrentarán un nuevo reto ante el aumento de precios. Por ejemplo, una bebida que cuesta 20 pesos podría incrementarse a 25, mientras que otras que actualmente cuestan 25 podrían llegar a 50, debido a que el proyecto de ley establece un aumento basado en los gramos de azúcar añadida.
Los voceros de Asibenas aclaran que su objetivo no es quejarse del impuesto en sí, sino crear conciencia sobre cómo la reforma podría perjudicar a las familias dominicanas. Citan experiencias regionales que demuestran que, en México, el 63.7% del impuesto recaudado provino de hogares de nivel socioeconómico bajo. En Colombia, el 49% de este impuesto fue asumido por la población de menor poder adquisitivo. Dada la situación actual en la República Dominicana, se teme que esta tendencia se repita.